27 de marzo de 2022.
Lecturas: Isaías 12:1–6. 2 Corintios 5:16–21. Lucas 15:1–3, 11–32
Jesucristo nos ha reconciliado con el Padre
|Dios Padre nos ha abierto Su corazón en amor. Mientras estábamos “todavía lejos”, Él nos vio y “sintió compasión” (Lucas 15:20). Por lo tanto, dio a su Hijo unigénito por nosotros, haciendo “pecado al que no conoció pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él” (2 Cor. 5:21).
Por el ministerio de la reconciliación, Él corre hacia nosotros, nos abraza con misericordia y nos reviste de su gloria como hijos amados en Cristo Jesús. Y por eso damos gracias al Señor nuestro Dios, que ha quitado nuestros pecados y apartado de nosotros su ira (Is. 12:1).
Porque Él se ha convertido en nuestra salvación, nuestra fuerza y nuestro canto, “confiaremos y no tememos” (Is 12, 2).